El Pleno del Cabildo de Gran Canaria ha aprobado este viernes, a petición del vicepresidente y consejero de Obras Públicas e Infraestructuras, Arquitectura y Vivienda del Cabildo de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, el gasto plurianual de 18.722.343 euros para las obras de rehabilitación estructural y casi completa del firme de la Circunvalación de Las Palmas de Gran Canaria (GC-3). Las obras, cuyo proceso de licitación comenzará a principios de 2025, se desarrollarán en un plazo de un año y medio contado desde otoño de ese mismo año.
El ámbito de actuación de estos trabajos, que se dividen en tres lotes, abarca las dos calzadas de la GC-3 durante cerca de 11 kilómetros, los que van desde el kilómetro 0, junto a la Potabilizadora, hasta el 10,7, en Tamaraceite. Se deja fuera de esta actuación la Fase IV de la Circunvalación, que el Gobierno canario puso en servicio en 2022, y el tramo de Las Mesas que ya fue reasfaltado por el Cabildo hace pocos años.
Teniendo en cuenta que el firme actual de las dos calzadas de la GC-3 presenta deterioro generalizado, su rehabilitación estructural se realizará mediante la ejecución del fresado del firme y la reconstrucción posterior del mismo. La rehabilitación del firme se extenderá también a varios ramales y conexiones de la Circunvalación con otras vías de la red insular de carreteras y con vías municipales.
Asimismo, la actuación contempla la ejecución de actuaciones complementarias como son la reposición de las marcas viales afectadas, elementos de balizamiento, sustitución de juntas de dilatación en tableros de estructuras, instalación de nuevos tramos de barrera de seguridad tipo bionda, recrecido y recalce de las barreras de seguridad existentes e instalación de nuevas estaciones permanentes de aforo.
Estos trabajos comprenden también la sustitución de varios metros de las barreras de seguridad en algunos tramos en los que no se ajustan a los condicionantes de la autovía ni a las actuales normas de seguridad vial.
Por último, los trabajos contemplan también la impermeabilización de los dos tableros del Viaducto del Guiniguada, un defecto que ha generado en los últimos años la infiltración del agua de lluvia en el tablero y ha afectado a los tendones de acero que sostienen el puente y que ahora se están sustituyendo por otros nuevos. Por ello se acometerá su impermeabilización al objeto de prevenir que en el futuro vuelvan a presentarse nuevos desperfectos.