El Cabildo de Gran Canaria ha extendido a varios ayuntamientos de la isla el sistema de ayuda a personas con pérdida de capacidad auditiva que permite el reconocimiento de sonidos y su transformación en alertas visuales, entre otras funciones, solución tecnológica basada en la inteligencia artificial que ya operaba en su propia Oficina de Información y Atención Ciudadana (OIAC).
Según señala el Consejero de Presidencia y Movilidad Sostenible, Teodoro Sosa, este proyecto, junto con otros que ya se han ejecutado este año y están en ejecución, contribuirá a hacer más accesibles y seguras las oficinas administrativas de los Ayuntamientos de la isla a las personas con pérdida de capacidad auditiva.
La extensión de esta solución tecnológica a los municipios se produjo a lo largo del presente 2024 tras su instalación en primer lugar en la sede del Cabildo y ha sido posible gracias a los fondos Next Generation de la Unión Europea en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, destinados a la modernización de los entes locales.
El objetivo de este proyecto es dotar de un sistema de accesibilidad auditiva, denominado Visualfy, a los edificios administrativos, a fin de mejorar la seguridad y accesibilidad para las personas sordas o con pérdida auditiva, mejorar su experiencia de usuario con la Administración y reforzar la responsabilidad social corporativa de los entes locales en donde se ha implantado, por el momento en La Aldea de San Nicolás, Firgas, Santa Brígida, Santa María de Guía y Teror.
Entre las principales funcionalidades del sistema Visualfy destaca la traducción de alertas sonoras a notificaciones visuales. A través de un sistema de inteligencia artificial se recogen las alertas sonoras que se produzcan en la planta en la que se ubiquen las oficinas de información y atención ciudadana, normalmente la planta baja de los edificios de servicios administrativos.
Este sistema muestra en forma de notificaciones visuales y sensoriales tanto en las luces de señalética instaladas en los edificios, como en los dispositivos (smartphones, smartwhatches, tablets, smartbands, etcétera) de los usuarios y usuarias que se descarguen la aplicación del sistema. A tal efecto, en las entradas de las oficinas se han colocado carteles informativos con un código QR.
Además, la transcripción de voz a texto facilita la comunicación con personas sordas o con pérdida auditiva por parte del personal que trabaje en el edificio. La solución se basa en un motor de reconocimiento de voz en tiempo real, que muestra en la pantalla del teléfono inteligente la trascripción a texto de la voz del interlocutor. De manera que será muy útil para eliminar las barreras de comunicación creadas, por ejemplo, por el uso de mascarillas que imposibilitan la lectura labial.
Asimismo, se han instalado bucles magnéticos de mostrador para que, situado entre las personas que conversan, recoja el sonido o conversación a través de un micrófono integrado y lo transmita en forma de señales inductivas directamente a los audífonos o implantes, evitando así ruidos ambientales e interferencias, consiguiendo de esta manera una comunicación óptima con la persona usuaria de audífonos o implante coclear.