El Pleno del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha aprobado este viernes el Plan Estratégico del Ciclo Integral del Agua 2024-2034, que prevé una inversión de 857 millones de euros en la renovación y modernización de las infraestructuras hidráulicas de la ciudad.
La hoja de ruta del Gobierno municipal que define y planifica las inversiones establece, como principales intervenciones, la construcción de una nueva depuradora y una nueva desaladora. En total, establece más de un centenar de actuaciones para reforzar la eficacia de la gestión del agua, reduciendo el impacto ambiental, y dar respuesta a las necesidades presentes y futuras de Las Palmas de Gran Canaria, especialmente, para prevenir los efectos del cambio climático.
La concejala de Aguas, Inmaculada Medina, ha explicado, durante la sesión plenaria, que “este plan surge por la necesidad de renovar y ampliar las infraestructuras existentes, adaptándolas al crecimiento demográfico y urbanístico de la ciudad; y por las nuevas exigencias legales y medioambientales”. Se trata, ha dicho Medina, “de un plan de gran envergadura que busca mejorar tanto el servicio de saneamiento como de abastecimiento, que va a precisar de una gran inversión”. La iniciativa está enmarcada en el proceso de modernización y mejora que se está llevando a cabo en todos los servicios municipales.
Para alcanzar estos objetivos, el plan plantea un centenar de intervenciones para ampliar y renovar la actual red de saneamiento y abastecimiento; 52 nuevas infraestructuras, que permitirán seguir garantizando el suministro del agua en todo el municipio ante cualquier circunstancia, y más de 1.029 kilómetros de redes, entre las que se amplían y se renuevan. Además, contempla la mejora de todas las instalaciones existentes.
Uno de los objetivos principales del plan es alcanzar el vertido cero. Así, con la implementación de este Plan Estratégico, el Ayuntamiento eliminará más de un centenar de puntos de vertidos al mar hasta alcanzar una cuota cero.
Duplicar producción de agua desalada
En materia de abastecimiento y producción, el Plan contempla una desaladora que elimine la dependencia de tener un solo punto de suministro, duplicando así la capacidad de producción de agua desalada, con 85.000 metros cúbicos al día cada una de ellas. De esta forma, las dos desaladoras podrán suministrar agua por separado a toda la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, ante cualquier situación y de forma más sostenible.
El plan contempla la ampliación de los depósitos estratégicos para aumentar la capacidad de almacenamiento, con la construcción de ocho nuevos y la ampliación o adecuación de los siete existentes, ampliando así en 200.000 metros cúbicos la capacidad de almacenamiento en la ciudad.
Además, se renovarán más de 600 km de red de transporte y distribución y se instalarán más de 70 km de red estratégica. Se renovará la red de abastecimiento que presente una alta incidencia y cuyo impacto sea de gran relevancia.
Con las nuevas redes y depósitos se garantiza el suministro de agua desalada a las zonas por debajo de la cota 300 y se garantizan alternativas de suministro a todo el municipio.
Saneamiento y depuración
El Plan Estratégico contempla la descentralización de las redes de la depuradora de Barranco Seco para reforzar las medidas preventivas que permiten garantizar el suministro a toda la isla.
Para ello, la hoja de ruta municipal incluye la creación de una nueva depuradora con capacidad para tratar 36.000 metros cúbicos de aguas residuales que permitiría descargar las redes de agua hacia las instalaciones de Barranco Seco que cuentan con una capacidad de tratamiento de 45.800 metros cúbicos al día.
Además, entrarán en funcionamiento 17 estaciones de bombeo: ocho para descentralizar el sistema y nueve más para extender la cobertura del saneamiento al 100% del municipio.
En paralelo, se renovarán o instalarán 314,3 km de redes y se instalarán 15 km de nuevos colectores.
Asimismo, se introducirán 18 tanques de tormenta para la laminación de los caudales de lluvia y se ampliará y mejorará la capacidad de los colectores principales del sistema. También se renovará la red de saneamiento que presente incidencias por antigüedad o condiciones de servicio y se mejorará la captación de escorrentía de aquellas zonas del municipio más susceptibles de inundación.
Otro de los vectores claves de este plan es la renovación de la red, tanto la estratégica, entre las EDAM y en zonas no abastecidas con agua desalada, como la del resto de la red, para cuyo fin se prevé una inversión de 192,2 millones de euros.
Inversión histórica
Los 857 millones de euros de inversión que supondrá esta estrategia se distribuirán anualmente a lo largo del periodo de vigencia del Plan Estratégico y alcanzará su mayor cuantía en el año 2027, en el que está prevista una inversión de 120 millones.
En este sentido, el Ayuntamiento trabaja para buscar fuentes de financiación sostenibles, para garantizar el éxito del plan con fondos públicos, entre los que se encuentran fondos propios municipales y de otras administraciones, tanto estatal, como autonómica e insular, así como fondos europeos.
La inversión del Plan se desglosa en tres grandes apartados: la inversión el Sistema de Abastecimiento y Producción que alcanza los 386,7 millones de euros; Sistema de Saneamiento y Depuración (278,5 millones de euros) y, por último, la inversión en las renovaciones del resto de las redes del sistema de abastecimiento será, aproximadamente, de 192,2 millones de euros