En el marco de esta iniciativa, que se ha llevado a cabo también en varios hospitales de otras comunidades autónomas, se celebraron dos talleres en el que participaron tanto pacientes como profesionales. En el primero de los talleres, los participantes expusieron qué supone padecer enfermedades de la piel tan condicionantes como son la dermatitis atópica y la psoriasis. En este sentido, incidieron, entre otros aspectos, en la fuerte carga emocional de estas patologías, así como en el estigma existente. Posteriormente, ambos grupos (pacientes y profesionales) analizaron las barreras y problemas a los que se debe enfrentar el paciente dermatológico con el objetivo de identificar oportunidades de mejora.
En el segundo taller, el trabajo se centró en fijar dichas oportunidades de mejora con el objetivo de crear una serie de proyectos. Los participantes también trabajaron en la autogestión de la enfermedad a través de un kit de recursos online y convencional con información en función de la patología y de su gravedad, todo ello validado por especialistas.
Con la puesta en marcha de esta iniciativa se pretende lograr objetivos concretos como son, entre otros, reducir las derivaciones a la atención especializada disminuyendo la presión asistencial, potenciar un sistema de comunicación integral con farmacia comunitaria y crear un grupo de autoayuda ante la carga psicológica que suponen las patologías dermatológicas. Los profesionales destacan que el trabajo conjunto con los pacientes permite obtener soluciones innovadoras que, con un enfoque meramente clínico o técnico, no habrían sido posibles conseguir de otra forma y que entroncan perfectamente en las estrategias de mejora puestas en marcha por el centro hospitalario.