La recova de Gáldar oferta siete puestos para la comercialización de los mejores productos locales

La Recova de Gáldar, punto de encuentro para toda la ciudadanía del municipio, oferta siete puestos para la comercialización de los mejores productos locales de kilómetro cero. Situado en la calle Capitán Quesada número 29, el Mercado Municipal cumple con el objetivo de impulsar el mercado tradicional frente a las grandes superficies. La Recova acoge con 17 puestos ya ocupados numerosos espacios de venta de frutas, hortalizas y verduras, además de tiendas ecológicas, dulcerías y una cafetería, así como una carnicería que ha sido uno de los últimos negocios en incorporarse, todos ellos con el denominador común del respeto al producto local.

La Recova, que entre los siete puestos ofertados incluye una pescadería ya habilitada, fomenta la imagen del puestero como una persona cercana y conocedora y promotora del producto, una de las cualidades más destacadas por la clientela. En sus 17 puestos ocupados el Mercado Municipal de Gáldar, construido en 1945, es uno de los que cuenta con más actividad y más historia en toda la isla. Con un horario de lunes a sábado de 07:00 a 14:00 horas y los jueves de 16:00 a 19:30 horas (los negocios que lo deseen pueden abrir de manera voluntaria el resto de tardes), La Recova de Gáldar, gestionada por la Concejalía de Mercados, acoge la visita de una clientela fija y habitual, tanto del casco del municipio como de otros puntos del norte, y recibe la visita de numerosos turistas de manera diaria.

El Mercado Municipal conserva la tradición con las dos obras alegóricas, una al mar y otra a la tierra, del escultor y artista galdense Juan Borges Linares, Hijo Predilecto de Gáldar, y otros dos murales de Diego Higueras que también realizó en homenaje a Antonio Padrón y a la Cueva Pintada, en su galería principal. Algunos de los puestos superan los cuarenta años de historia en la instalación y otros muchos son consecuencia de una gran tradición familiar, lo que ensalza la cercanía, la confianza y el conocimiento de los puesteros.

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