El próximo sábado 25 de febrero se celebrará la primera Asamblea de la Reserva de la Biosfera de Gran Canaria. El evento comenzará a las 11:00 en el Centro de Interpretación ‘Los Caserones’ (antiguo parador), en la playa de La Aldea. En este acto se elegirán a las 15 personas miembros del Consejo de Participación Pública.
Hace 17 años que la zona terrestre suroeste de Gran Canaria y una amplia franja marina fue reconocida como Reserva de la Biosfera por la Unesco. Tras un largo proceso, unido a la declaración de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria como Patrimonio Mundial, se constituyó el Instituto Insular para la Gestión Integrada del Patrimonio Mundial y la Reserva de la Biosfera, integrando ambos entes, con la finalidad de una gestión más ágil y conjunta aunque manteniendo sus diferencias.
La finalidad de esta cita es configurar el organismo que permitirá centrar los esfuerzos de las entidades públicas y privadas en la defensa de este importante territorio que obtiene el reconocimiento y respaldo de los organismos internacionales.
Uno de los próximos objetivos se emplaza en 2025, cuando habrá que presentar el segundo ‘Informe Decenal’, donde se compruebe que se siguen cumpliendo los requerimientos para seguir siendo un territorio reconocido por la Unesco con la declaración de Reserva de la Biosfera. Este es uno de los motivos por los que vertebrar esta estructura, íntegramente centrada en la isla, es clave para mantener dicho reconocimiento, tal como establece la propia Unesco.
El propósito de la reunión es fundamentar los órganos gestores complementarios y establecer las personas que formarán parte de los mismos, desde la presidencia hasta la secretaría de la misma pasando por los vocales. Estos últimos están recogidos en los Consejos de Participación Pública, incluyendo a sectores como la pesca, ganadería, turismo, comercio o artesanía entre otros, los cuales estarán representados.
El carácter del proyecto es claramente social, sin olvidar los aspectos medioambientales y científicos en un territorio mayoritariamente protegido. Entre las actividades de este organismo figura la realización del seguimiento y asesoramiento de las acciones a desarrollar y cuenta con el apoyo de otros órganos que cuentan con la colaboración de especialistas en las distintas materias (patrimonio histórico, geología, flora, fauna, cultura o sector primario). En definitiva, se pretende fomentar la participación de las personas implicadas en la Reserva de la Biosfera para que sus valores no sólo se mantengan sino que puedan aumentar.