El Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria, que se celebrará del 26 de enero al 18 de febrero, se realizará en el Puerto, en el entorno de la rotonda de Belén María.
Así lo ha anunciado la alcaldesa Carolina Darias en un acto festivo que contó con la complicidad de los agentes de la fiesta y de ciudadanos que, expectantes, se acercaron a celebrar en La Puntilla el anuncio oficial que pone en marcha la maquinaria del Carnaval. A su lado, y participando de las emociones del momento, se encontraban la concejala de Carnaval Inmaculada Medina, que confirmó que Alberto Trujillo se pondrá al frente del escenario principal del recinto; y el director artístico, Josué Quevedo, que explicó el diseño de un espacio que integra a todos los públicos y a todos los actos en un único emplazamiento.
Cerca de 20.000 metros cuadrados, prácticamente diáfanos, estarán al servicio del Carnaval y su actividad con zonas para público familiar, juvenil y adulto, tanto en los tradicionales chiringays, como en el espacio reservado a galas, concursos y grandes conciertos. Estas dos cuestiones fueron subrayadas por las personas convocadas en el transcurso de la presentación. Y es que ambos aspectos contribuyen a dibujar un panorama ilusionante, a tenor de lo expuesto en la tarde del viernes 20 de octubre.
La alcaldesa Darias celebró el regreso al origen, el situarlo en el barrio que fue cuna del Carnaval tras la Dictadura, una manera de señalar especialmente su idiosincrasia y su vocación de honrar el pasado mirando al futuro. “Los Carnavales de Las Palmas de Gran Canaria se desarrollarán junto al Puerto de La Luz, en el espacio ubicado entre la Plaza Belén María y la subida al Sebadal y en las calles de La Isleta”, detalló. Momento en que mostró públicamente su agradecimiento a la presidenta de la Autoridad Portuaria, Beatriz Calzada y a su director, Fran Trujillo, por “la disposición a colaborar con el Ayuntamiento de la ciudad, para buscar el mejor espacio”, puntualizó.
Las palabras de la concejala estuvieron dirigidas a Trujillo, a quien presentó como el diseñador que más decorados ha realizado en la historia reciente del Carnaval: de 1995 a 2007 y de 2012 a 2016. Sobre el encargo al reputado escenógrafo, Medina explicó que sin resolverse la ubicación no pueden lanzarse convocatorias que exigen planos y desarrollos técnicos. Una vez resuelto el asunto, “el tiempo apremia”, argumentó. Al respecto señaló que el trabajo de la búsqueda del espacio ha resultado “intenso, enriquecedor, exhaustivo e ilusionante, porque ha sido un trabajo que mira al futuro y que demostrará la resiliencia de la Fiesta más importante de Gran Canaria”.
También Trujillo subió al escenario para agradecer al Ayuntamiento y al equipo del Carnaval la confianza depositada en su trayectoria.
La intervención del director artístico Josué Quevedo estuvo dirigida a explicar, a través de infografías, cómo quedará perfilado el recinto del Carnaval. Punto por punto, Quevedo fue señalando las posibilidades de un Carnaval global que como Fiesta de Interés Turístico Internacional permite una vivencia única en un solo punto de la ciudad, en el barrio en el que nació. Así, detalló que habrá una zona familiar con actividad para la cantera del Carnaval, con feria de atracciones y completamente diseñada para ellas y ellos en la Plaza de La Luz; los y las más jóvenes tendrán un lugar en Manuel Becerra con un escenario que acogerá un programa especial para este público en conciertos de noche y Carnavales de día. Otro punto a destacar está en el lugar que se otorga a los chiringays, puestos inherentes a la fiesta grancanaria que forman parte de su historia y constituyen un plato fuerte de las carnestolendas. Su zona se levantará en el parque de Los Patos cerca de la Fábrica del Hielo, mientras que el otro lado del parque estará ocupado por restauración. Por último, el escenario principal que acogerá galas y concursos, así como grandes conciertos se dibujará en la explanada que se sitúa en Belén María, accediendo por el Sebadal.
Para los presentes, es de gran importancia reunir a todos los amantes de las carnestolendas en un área, una virtud significativa para que el espíritu festivo fluya por todos los rincones del recinto y que todos y todas los que quieran vivir la experiencia del Carnaval puedan hacerlo en plenitud, sin disgregar sus contenidos por distintos lugares.
El acto finalizó con una despedida en la que la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria enunció los ingredientes del Carnaval de 2024: “espectáculo, calidad, calle, emoción y mucha ilusión”. Y, después de anunciar que oficialmente la cuenta atrás había comenzado, invitó al público a ponerse su mejor disfraz y a abrir puertas al Carnaval, justo en el instante en el que un panel descubría un escenario sobre el que una orquesta puso a los y las presentes a bailar.