Los bailes del Viernes de Piñata se caracterizaron por la tranquilidad y escasas asistencias entre los carnavaleros. Los distintos servicios de seguridad y emergencias atendieron a un total de 57 personas durante toda la noche, aunque no se registraron incidencias de relieve. Como suele ser habitual las intoxicaciones etílicas protagonizaron el mayor número de atenciones, el 50 por ciento del total. En cuanto a la afluencia de público se puede calificar la pasada noche como una jornada festiva de transición ante la celebración del próximo Carnaval de Día.
Del total de quienes precisaron ayuda, por edades, se distribuyeron entre 49 adultos y ocho menores. Respecto al género de las personas asistidas 31 fueron hombres y 26 mujeres.
Las intoxicaciones etílicas alcanzaron los 28 casos. El consumo excesivo de alcohol afectó a 25 adultos y tres menores. Otra circunstancia muy frecuente en esta jornada fueron los accidentes por traumatismos y caídas registrándose nueve casos. Respecto a las situaciones calificadas como agresiones se atendieron siete incidencias; unos ocho carnavaleros recibieron atención por enfermedades comunes.
Un total de seis personas tuvieron que ser trasladadas a centros hospitalarios para la realización de pruebas diagnósticas o recibir una atención más especializada debido a su patología. En la categoría de otras causas se registraron cinco incidencias.
En el dispositivo preventivo y sanitario destinado a los más jóvenes y gestionado por Cruz Roja Española, en coordinación con la unidad de la Policía Local adscrita a la Fiscalía del Menor, el grupo policial registró y analizó los datos de ocho menores, cinco chicas y tres chicos.
Los agentes de la Policía Local mantuvieron los habituales retenes distribuidos por la geografía carnavalera, en materia de arrestados el cuerpo policial municipal detuvo a un varón por un posible delito contra la salud pública. Por su parte, los miembros de la Policía Nacional practicaron dos detenciones, una por una agresión en el entorno de la plaza de España; y otra debida a un delito contra la salud pública. Ya en horario de madrugada, la Policía Local se ocupó de cerciorarse sobre el cumplimiento del final de las actividades musicales y el cierre de quioscos y locales dentro de la zona del cuadrilátero carnavalero.
En el Punto Violeta, presente en el Hospital del Carnaval, las profesionales destinadas en dicho recurso recibieron dos consultas y asumieron una acción de sensibilización.
El lunes por la noche trabajaron efectivos de la Policía Local, Policía Nacional, del Consorcio de Bomberos de Tenerife, de la agrupación de voluntariado de Protección Civil santacrucera y el personal sanitario de Cruz Roja Española. Todos ellos coordinados desde el Puesto de Mando Avanzado (PMA) ubicado en el Hospital del Carnaval en la plaza General Gutiérrez Mellado de la capital tinerfeña.
A través de las cuentas municipales en Twitter del Centro de Coordinación Operativa de la Administración Municipal (Cecopal) @CECOPALSC o de la Policía Local capitalina @PoliciaLocalSC así como del voluntariado de Protección Civil @ProteCivilSCTF se han emitido las informaciones sobre la evolución del trabajo realizado anoche con la etiqueta #HospitalCarnavalSC